Good luck 4 me

Hace unos días me encontré con una sorpresa al salir por la puerta trasera del Starbucks del centro de la ciudad.
Una sorpresa en forma de papel, de un color amarronado de 12x7 aproximadamente, y que buscaba dueño. Es extraño que estuviera allí, era fácil de ver, debido a la extremada limpieza de la calle. Pero mi vista de lince lo vio enseguida, cincuenta euros tirados no se ven cada día.
 
Si fuera un comic, en ese momento me hubiera aparecido el ángel a la derecha y el demonio a la izquierda, o viceversa que más da. En un primer momento, será por eso de que aquí nadie coge nada que no le pertenezca, me giré a unas señoras haciéndole un gesto para preguntarle si era suyo, como si el billete tuviera nombre y apellidos. Después de su no, volví a ser yo, y directamente se vino conmigo, a pesar de que tampoco fue demasiado difícil si pensaba en todo lo que podía hacer con ellos.
 
El caso es que, no se porque motivo, el billete no lo cambié ni gasté ni a tiros, y no sólo eso, sino que fui capaz de pagar con targeta teniéndolos en la cartera. Como si tuvieran que mantenerse intactos el máximo tiempo posible. Algo raro digno de análisis.
Finalmente los invertí en mi crema de noche que promete maravillas y que hasta ahora me está funcionando estupendamente.
Ahora sólo hago que mirar al suelo por si algún despistad@ va perdiendo la carga.

Look del 19:

Boots: River Flight

Leggins: Falke

Sweater: Sud Express

Skirt: Local Shop München

Jacket: Zara

Bag: Louis Vuitton

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